Cuando asumí el cargo de director de eSports y juegos en Nuvei, sabía que iba a ser una tarea apasionante. Los eSports eran una industria en auge incluso antes de la pandemia, y después de 2020 son una potencia mundial. Sin embargo, muchos operadores de eSports, carecen de orientación experta, y aún no han actualizado sus sistemas de pago a medida que han ido escalando. En este artículo, explicaré las oportunidades que se pueden obtener forjando asociaciones de pago y ofreciendo experiencias de pago conformes y fluidas en todo el mundo.
Los videojuegos competitivos existen desde la década de 1970, pero fue con la llegada de Internet de alta velocidad en los años 90 cuando el sector despegó realmente, encabezado por la comunidad de jugadores de Corea del Sur. Desde entonces, el sector se ha convertido en una fuerza global y, aunque la región de Asia-Pacífico sigue dominando, el resto del mundo se está poniendo al día: a nivel mundial, el sector ingresó más de 950 millones de dólares en 2020. Business Insider estima que esta cifra aumentará hasta los 1.500 millones de dólares en 2023.
Las competiciones en vivo también suelen ser multitudinarias -174.000 personas asistieron al Intel Extreme Masters Katowice en 2019- y, aunque la COVID-19 puso fin a estos eventos, el estilo de vida forzado de quedarse en casa en 2020 en realidad dio un impulso a los eSports, en parte porque los aficionados a los deportes tradicionales recurrieron a los pasatiempos virtuales en lugar de los eventos deportivos en vivo. El número de espectadores ocasionales creció de 245 millones a 272 millones de 2019 a 2020, y los espectadores frecuentes crecieron de 198 a 223 millones.
¿Por qué hay tanta gente que disfruta viendo a otros jugar a los videojuegos? Por la misma razón por la que disfrutan viendo a los deportistas jugar al fútbol o al baloncesto. En ambos ecosistemas, la gran mayoría de la comunidad está formada por aficionados que sintonizan para ver a jugadores profesionales que han dedicado su vida a dominar el deporte que han elegido. Estos aficionados también disfrutan ellos mismos de estas actividades como pasatiempos: personalmente, crecí jugando al fútbol antes de empezar a jugar al FIFA, y mi afición al ajedrez me llevó a la pasión por League of Legends.
Para los apostadores, los eSports tienen una serie de ventajas: por ejemplo, las apuestas son mucho más lucrativas porque el grupo de jugadores es relativamente nuevo y desconocido, a diferencia del deporte tradicional, donde los resultados son más predecibles.
Ahora, con el despliegue de las vacunas masivas, es probable que pronto volvamos a ver los grandes eventos con todas sus correspondientes oportunidades de ingresos. Ahora que el sector vuelve a estar totalmente en línea con la cuota de mercado adicional obtenida a lo largo de 2020, es el momento de que los operadores de eSports se aseguren de contar con un pago partner que esté aprovechando todas las ventajas de los pagos digitales para ellos, porque con mayores ingresos vienen los correspondientes problemas para aquellos que no estén preparados.
Por ejemplo, los retrasos en los pagos a los ganadores perjudican la reputación de los operadores de juegos. Las bolsas de premios de algunas competiciones de eSports ascienden a millones de dólares, y la bolsa de premios del campeonato de Call of Duty de 2020 alcanzó los 4,6 millones de dólares. DOTA 2, una competición internacional, no se celebró en 2020 debido a la pandemia, pero en 2019 su bolsa de premios fue de 34,3 millones de dólares. Aunque los botes de este tamaño son atractivos, los retrasos en los pagos a los ganadores pueden arruinar el buen nombre de un operador de juegos.
También es importante tener en cuenta que estos botes atraen a jugadores de todo el mundo, es decir, de jurisdicciones con diferentes requisitos normativos. Las grandes transferencias internacionales pueden llamar la atención de los organismos reguladores y de los emisores, lo que puede dar lugar a retrasos, rechazos de pagos y mayores gastos de tramitación. Las empresas deben buscar socios de pago que tengan experiencia en el juego para mantener unos márgenes bajos y que proporcionen suites de pago eficientes y conformes que funcionen en todos los mercados mundiales, desde Norteamérica hasta China.
La cuestión de las diferencias geográficas también es relevante cuando se trata de los hábitos de consumo. Los jugadores internacionales traen consigo aficionados que quieren pagar por ver las retransmisiones de sus héroes, comprar artículos y equipación, e incluso asistir a eventos en directo. Sin embargo, las preferencias de pago en línea difieren de una región a otra, y un enfoque único no funcionará.
Los operadores que deseen escalar a nivel internacional deben ofrecer opciones de pago adaptadas a su mercado objetivo, porque la gente abandonará sus compras si la experiencia de pago no parece segura o reconocible. Por ejemplo, los operadores deben integrarse con los métodos de pago alternativos de un mercado determinado -como un monedero digital popular, por ejemplo-, así como ofrecer una conversión de divisas transparente y comprensible y opciones de pago de suscripciones sin fisuras. Yo, por ejemplo, crecí en París y resido en Londres, por lo que tengo fácil acceso a productos de pago de alcance mundial. Pero, ¿tiene mi familia del sur de Asia la misma experiencia? ¿Podrían comprar algo en Estados Unidos con su método de pago preferido?
Otra forma segura de perder ingresos y reputación es el tiempo de inactividad de los pagos. El comercio basado en el deporte es sensible al tiempo, ya que los comerciantes reciben flujos de mercancías e ingresos por streaming durante los eventos, por lo que sólo se necesitan unos minutos de inactividad para perder miles de dólares en ventas. Los operadores deben buscar socios que estén preparados para manejar picos de volumen y que operen con centros de datos de respaldo para problemas técnicos. Por ejemplo, Nuvei opera con un 99,99% de tiempo de actividad y cuenta con centros de datos de respaldo en caso de problemas técnicos.
Con la tecnología adecuada, se pueden evitar fácilmente los escollos del comercio electrónico. Por ejemplo, los rechazos de pagos y las devoluciones de cargos pueden ser un problema grave en las transacciones internacionales, pero con la detección de fraudes, la protección contra devoluciones de cargos y una red global de adquirentes locales, se pueden proteger los ingresos y optimizar las tasas de aprobación.
La fiabilidad en los pagos a escala también es relevante para atraer a los inversores: la inversión en los esports creció de 490 millones de dólares en 2017 a 4.500 millones de dólares en 2018, según Deloitte. Los esports ya no son una industria de base, y para atraer a los inversores es necesario inspirar confianza en todos los aspectos de un negocio.
A medida que los deportes electrónicos se han ido ampliando, los operadores tienen que asegurarse de que su sistema de pago pueda seguir el ritmo de su crecimiento, tanto en términos de ingresos como de geografía. Hay un mundo de oportunidades, y la tecnología existe para aprovecharlo; los operadores solo tienen que asegurarse de elegir a los socios adecuados.
Si tienes un negocio de eSports y estás buscando socios que te ayuden a escalar y prosperar, no dudes en ponerte en contacto conmigo a través de LinkedIn para una consulta gratuita.
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Dan Houl es el Jefe de eSports y Gaming, Pagos Digitales de Nuvei. Es responsable de desarrollar las relaciones de Nuvei con sus clientes de eSports y gaming, así como de ayudar en el ecosistema de los videojuegos en relación con los eSports. Dan tiene 14 años de experiencia en ventas, operaciones, finanzas, marketing y gestión, incluso en empresas como Google y Apple, y habla diez idiomas, entre ellos chino, español, japonés y francés. Es licenciado en Lenguas Extranjeras y en Marketing, Comunicación y Negociación y Gestión de Negocios Internacionales, y tiene títulos adicionales en Economía y Gestión e ingeniería de la nube. En su tiempo libre, le gusta viajar, aprender idiomas, los videojuegos y pasar tiempo con su hija recién nacida.
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